“Es necesario avanzar en acciones inmediatas que están dentro del alcance de las responsabilidades del Gobierno Municipal, a fin de garantizar la infraestructura básica mínima, que permita y contribuya a mejorar el servicio para la gente”, argumentó José Alberti, concejal de Comunidad Autonómica (C-A), y también vicepresidente del Legislativo, sobre la urgencia y relevancia de dar soluciones de fondo al problema de los micros y la incertidumbre de las tarifas.
Cuestionó que ya corran tres años de gestión y este tema continúe en el limbo. Para él, se debe priorizar, desde el Ejecutivo municipal, el mantenimiento de las rutas de transporte público, y dijo que esta es una tarea específica para la Secretaría de Obras Públicas.
También recalcó que todas las rutas de transporte público deben estar bien señalizadas, desde la Secretaría de Tránsito y Transporte; bien iluminadas, lo que incide directamente en la seguridad del ciudadano de a pie, y recalcó esta responsabilidad a la Dirección de Alumbrado
Público.
También recomendó la capacitación a choferes del transporte público, desde la Secretaría de Tránsito y Transporte, en seguridad vial y buen trato al ciudadano.
Observaciones
Para Alberti, las políticas de transporte, tanto nacionales como municipales, benefician mucho más a la clase de mayor capacidad económica, que tiene vehículo privado, porque “el subsidio al combustible beneficia en 600% más al que tiene auto que al que usa el transporte público”.
Dijo que, en un cálculo aproximado, por cada Bs 1 para el ciudadano de a pie, se subvencionan Bs 6 para quien tiene un vehículo.
Asimismo, observó que el municipio invierte en obras que benefician al vehículo privado, megaobras de pasos a nivel y nuevas avenidas y calles.
“El alcalde tiene miedo a los transportistas y no pelea por un mejor servicio. No hay política ni nacional ni municipal, ni plan para mejorar el transporte público. Transformar el sistema de transporte público cruceño es imperativo”, insistió.
Al pedido de incremento de las tarifas urbanas, Alberti respondió que es una competencia exclusivamente municipal, y que su efecto, en caso de incremento, “se dará en el índice de precios al consumidor, y por ende en la inflación”.
Para él, antes de pensar en incrementar el pasaje de transporte público, se debe abordar “cómo vamos a cambiar el sistema actual, arcaico e inseguro; es decir, a qué se comprometen los transportistas para mejorar la calidad del servicio”. finalizó.